El reto salió a medias.
Después de enviar este pichón sin entrenamiento previo a Consuegra (Toledo), que está a 296 km, decidí cambiarlo de línea y mandarlo a Menorca. No tenía alternativa. No pude hacer ningún entrenamiento ni a Ibiza ni a Mallorca para preparar y/o descartar palomas . Situación que me impedía elegir entre palomas que se hubieran desempeñado bien en tales entrenamientos.
Ha volado con la única motivación de su cuenco de barro. Sin emparejar y con apenas tres semanas en el nuevo palomar.
EL ROJO INGLÉS (Foto tomada a los minutos de llegar y tomar posesión de su nido)
MARCÓ AL SEGUNDO DÍA EN EL Nº 47 DE LOS 280 EN CARRERA
En el reloj lo metí a las 10:31:57. Pero desconozco a qué hora llegó esta mañana. Después de tanto relámpago, tanto trueno y tanta lluvia durante prácticamente todo el día 21, al oscurecer decidí retirar el reloj. Lo más normal es que no regresara ninguno de los tres que había mandado.
Después de desayunar, tranquilamente he bajado a ponerles el grano a las palomas. He visto con sorpresa revolotear a una paloma y he exclamado: ¡Joder, el rojo! Rápidamente he cogido el reloj y después de abrir la entrada al palomar, he empezado a llamarlo a ver si bajaba del tejado.
En resumen, muy satisfecho de mi participación en la carrera de Menorca.
Pero no quiero dejar de remarcar que Alicante, al menos Santa Pola y por lo que me han contado los compañeros, toda la provincia, fue como dijo Stalone un INFIENNO.
Después de enviar este pichón sin entrenamiento previo a Consuegra (Toledo), que está a 296 km, decidí cambiarlo de línea y mandarlo a Menorca. No tenía alternativa. No pude hacer ningún entrenamiento ni a Ibiza ni a Mallorca para preparar y/o descartar palomas . Situación que me impedía elegir entre palomas que se hubieran desempeñado bien en tales entrenamientos.
Ha volado con la única motivación de su cuenco de barro. Sin emparejar y con apenas tres semanas en el nuevo palomar.
MARCÓ AL SEGUNDO DÍA EN EL Nº 47 DE LOS 280 EN CARRERA
En el reloj lo metí a las 10:31:57. Pero desconozco a qué hora llegó esta mañana. Después de tanto relámpago, tanto trueno y tanta lluvia durante prácticamente todo el día 21, al oscurecer decidí retirar el reloj. Lo más normal es que no regresara ninguno de los tres que había mandado.
Después de desayunar, tranquilamente he bajado a ponerles el grano a las palomas. He visto con sorpresa revolotear a una paloma y he exclamado: ¡Joder, el rojo! Rápidamente he cogido el reloj y después de abrir la entrada al palomar, he empezado a llamarlo a ver si bajaba del tejado.
En resumen, muy satisfecho de mi participación en la carrera de Menorca.
Pero no quiero dejar de remarcar que Alicante, al menos Santa Pola y por lo que me han contado los compañeros, toda la provincia, fue como dijo Stalone un INFIENNO.
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